El pasado 2 de abril, jugamos el partido de vuelta contra el equipo Santiago Apostol. Como adelanto, tuvimos un final un tanto inesperado, tanto por el resultado como por la lesión de una compañera.
El primer set estuvo bastante reñido, la recepción nos salió bastante mejor que en los demás partidos y acabamos con un resultado en contra de 25-23. Sin embargo, esto no fue motivo de venirnos abajo, o eso pensaba yo.
El Santiago Apostol es el segundo equipo en la tabla de resultados y, en la primera vuelta conseguimos ganarles 2-1. Por todo esto, nos enfrentábamos al segundo set con la idea de poder empatar y jugar un tercero al desempate, pero no nos salió como esperábamos.
Al comienzo del tercer set, nos despistamos y no conseguíamos ganar saque y para colmo, una jugadora, Rebeca, se hizo un esguince a cuatro puntos de la derrota. Para rematar el partido, nunca mejor dicho, no teníamos ni un solo cambio, por lo que Rebeca tuvo que aguantar hasta que el partido terminó.
Como conclusión, fue un partido en el que nos superamos en algunos aspectos, pero nos quedamos con mal sabor de boca, nada que no se pueda mejorar en los partidos siguientes.

Por bufalito